Por Cristhian Lucero
Antigua GFC se consagró con su quinto trofeo de la Liga Nacional, al vencer de visita 1-2 a Municipal.
El encuentro, que se disputó el domingo 18 de mayo en el estadio Manuel Felipe Carrera, vio la obtención de un nuevo título por el conjunto panzaverde, luego de seis años de sequía.
El estadio estuvo abarrotado de aficionados escarlatas alentando a su equipo desde el inicio. Los jugadores del Municipal salieron con confianza al terreno de juego y lograron abrir el marcador al minuto 24, por medio de John Robert Méndez, quien se encargó de enviar el balón al fondo del arco con un cabezazo.
Los rojos se llevaron la ventaja al descanso; sin embargo, Antigua tomó las riendas del partido y logró empatar el encuentro al minuto 73. José Ardón fue quien desvió un disparo y puso el gol de la paridad.
“Sabíamos que nos jugábamos mucho en este partido, era ser campeones y jugar internacionalmente. Lo hicimos sufriendo, pero ganamos, y hoy somos campeones”, declaró Ardón tras el encuentro. Al referirse a su gol, indicó: “Era importante mantener vivo al equipo; se logró la anotación, se me da muy bien este estadio, he tenido varias anotaciones acá, ahora a disfrutar la tan ansiada quinta”, dijo.
El empate señalaba que todo seguiría así y se extendería a los tiempos extras, hasta que al minuto 90+5’, Dewinder Bradley apareció en un tiro de esquina para cabecear y anotar el segundo gol del cuadro “panzaverde”, que concretó la victoria 1 a 2 y el campeonato del conjunto colonial.
“Yo no tendría que estar haciendo nada en esa área; no era el movimiento que practicamos en la semana; sin embargo, intuí que por ahí podía quedar algún rebote o un rechazo, y pues tuve la oportunidad de que la pelota pasara en limpio y me cayera en la cabeza. La puse, y gracias a Dios fue gol”, relató Bradley. El tanto desató la celebración de los jugadores antigüeños, que invadieron el campo una vez sonó el silbatazo final.
Luis Morán, arquero antigüeño, fue protagonista al concluir una temporada ideal. “Muy contento, resumiendo todo, es felicidad; gracias a Dios se nos dio un resultado que hace años veníamos luchando. Nos quedábamos siempre en la orilla, y hoy se nos dio, bendito sea Dios”, expresó.
Morán destacó además la clasificación a la Copa Centroamericana: “Vamos a tratar de lucharla otra vez. El secreto es insistir siempre, luchar e ir para adelante. Siempre va a haber derrotas, lógicamente, pero hoy se nos dio. El secreto es insistir siempre, luchar e ir para adelante, siempre va a haber derrotas, lógicamente”.
El guardameta, originario de Oratorio, Santa Rosa, dedicó el triunfo a sus seres queridos: “La inspiración siempre es mi familia, mi esposa, mis hijas, mi madre y mis hermanos, que me apoyan desde lejos; esto es parte de ellos y de nuestro Señor Jesucristo que me da la fortaleza para ir entreno tras entreno y partido tras partido”, agregó el guardameta.
Bradley, por su parte, subrayó la importancia del esfuerzo colectivo: “El trabajo era el mismo. El torneo fue muy irregular, pero siempre creímos en la mano del cuerpo técnico. Lo logramos concretar, y gracias a eso estamos siendo campeones”, expuso el delantero, oriundo de Boca del Monte.