La reestructuración del
Barcelona comenzó a paso firme. Después de la destitución de Quique Setién como
entrenador del primer equipo, Ronald Koeman llegó a la entidad catalana con la
difícil tarea de depurar un plantel cargado de jugadores experimentados.
Luis Suárez fue la primera figura en caer. Según informaron los medios catalanes Sport y Mundo Deportivo, el holandés le comunicó al delantero, quien se encontraba de vacaciones, que no estará dentro de su proyecto y el objetivo de la dirigencia es buscarle un nuevo destino antes de la reanudación de los entrenamientos.
Por la misma vía y con el
mismo motivo el ex técnico de la selección holandesa también habría hablado con
el chileno Arturo Vidal para que se buscara un nuevo equipo ya que no contaría
con él a futuro.
Vidal pareciera tener un
destino más asegurado ya que cuenta con varios pretendientes de la Serie A como
el Inter o la Juventus de Andrea Pirlo.