El 3 de mayo es una de las fechas más relevantes para el periodismo, y este año en su 27ava. Edición, tanto la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) como la *Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) reconocen el papel de los medios de comunicación y periodistas en medio de la pandemia del covid-19.
Es una fecha para fomentar y desarrollar iniciativas en favor de la libertad de prensa, y para evaluar el estado de la libertad de prensa en todo el mundo.
El Día Mundial de la Libertad de Prensa se celebra cada 3 de mayo, y fue instaurado en conmemoración de la Declaración de Windhoek, documento que contiene principios sobre la defensa de la libertad de prensa, redactado en 1991 durante una reunión de periodistas africanos impulsada por la UNESCO.
Christopher Barnes, presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y director de The Gleaner Company (Media) Limited, Kingston, Jamaica, dijo que a pesar de la época de incertidumbre y volatilidad causada por la pandemia del covid-19, se hace una pausa para celebrar el hecho que las personas están apreciando a los medios de comunicación tradicionales y al periodismo como su fuente primaria y confiable de información.
La clave de esta confianza en los medios de comunicación por arriba de otras formas de comunicación donde abunda la desinformación, la mentira y los rumores, es debido al arduo trabajo que los medios y periodistas hacen a diario para convertir datos complejos en información fiable, afirmó Barnes. Por estas razones la labor periodística es más relevante en estos momentos:
El contenido de calidad es un trabajo caro y riesgoso. Periodistas y editores trabajan y filtran datos con rigurosidad y precisión.
Muchas veces deben asumir riesgos para sortear restricciones y limitaciones de todo tipo para acceder a información que los perpetradores, oficiales y privados, quieren ocultar.
Observar, preguntar, investigar, denunciar, exponer, criticar y mostrar nuevos caminos y soluciones son los aportes de siempre del buen periodismo.
Es por esta consistencia en el periodismo de calidad por lo que las sociedades consideran a los medios tradicionales como “servicios esenciales” durante esta pandemia global. La Constitución Política de Guatemala en su Artículo 35 señala que: “La actividad de los medios de comunicación social es de interés público…”
Según el rankin Mundial de la Libertad de Prensa 2020, Guatemala ocupa el puesto 116 de 180 países.
La Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa, que evalúa cada año la situación del periodismo en 180 países y territorios, muestra que los próximos diez años serán sin duda “una década decisiva” para la libertad de prensa debido a las crisis que afectan al futuro del periodismo: geopolítica (agresividad de los modelos autoritarios), tecnológica (falta de garantías), democrática (polarización, políticas de represión), de confianza (desconfianza, e incluso odio, hacia los medios de comunicación) y económica (empobrecimiento del periodismo de calidad). Recortes de personal e impacto económico en los medios.
Barnes lamentó que la pandemia ha debilitado aún más las bases financieras de muchos medios de comunicación.
La caída abrupta de la publicidad y de la circulación debido a la recesión económica ha obligado a muchos medios a recortar personal y periodistas.
En muchos países, desde Estados Unidos a Jamaica o desde Ecuador a Bolivia, los medios están agobiados y son escasas las alternativas para apuntalar su sustentabilidad.
En Bolivia, por citar un ejemplo, los diarios, en la última década, han sido víctimas de discriminación y castigados durante las crisis políticas que afectaron al país.
En la actualidad, con el agravante que representan los efectos de la pandemia, su estado financiero se encuentra en una etapa crítica y necesitan soluciones urgentes que les permitan continuar operando.
En este sentido, Barnes celebró que todo tipo de iniciativas y fórmulas que los medios están adoptando para mantener sus servicios informativos cuando más se necesitan.
También, apoya las iniciativas privadas como las de Google y Facebook que están ofreciendo apoyo económico a los medios locales para continuar con su transformación digital.
Entre otras fórmulas de éxito, son claves las alianzas que muchos medios y periodistas han hecho a nivel nacional e internacional para trabajar en conjunto, ya sea con investigaciones regionales o para campañas de educación sobre salud pública.
También se valora la determinación de los medios y periodistas para operar en esta época en que se han agudizado las restricciones de acceso a las fuentes con motivo de los estados de excepción, como quedó expuesto en Aruba, Chile, El Salvador y Trinidad y Tobago, entre otros países.
Llamado a gobiernos para garantizar seguridad
El presidente de la SIP enfatizó el hecho de que todavía vivimos en una región donde el valor de los periodistas se pone a prueba todos los días, y rechazó la violencia y la impunidad que rodea a los crímenes contra periodistas.
Asimismo, afirmó que mantiene la esperanza que los gobiernos de Brasil, Colombia, Ecuador, Guatemala, Honduras, México y Paraguay reforzarán los sistemas de protección y seguridad para periodistas con recursos humanos, técnicos y económicos.
*La SIP es una entidad sin fines de lucro dedicada a la defensa y promoción de la libertad de prensa y de expresión en las Américas. Está compuesta por más de 1 mil 300 publicaciones del hemisferio occidental; y tiene sede en Miami.