Otros cuatro asistentes a la fiesta clandestina que indignó
a Guatemala quedaron ligados a
proceso penal y se les fijó una caución
económica de siete mil quetzales a cada
uno.
Cuatro jóvenes enfrentaron la audiencia de primera declaración
ante la jueza Segunda de Primera Instancia Penal, Virginia de León, quien
resolvió que deben enfrentar el proceso por el delito de contravención de
medidas sanitarias, este 16 de julio.
Los jóvenes deben
presentarse cada 15 días a la sede central del Ministerio Público para el
control biométrico. "No podrán decir no voy porque está cerrado. Allí
siempre se mantiene abierto, las 24 horas", les dijo la jueza sobre la impresión
dactilar.
Los cuatro se presentaron de manera voluntaria, luego que
se girara orden de captura en su
contra.
Se trata de Gabriel
Quiñónez Arzú, Ricardo Coba, Christian Wandel y Daniel Zarco.
Se les prohibió asistir a reuniones sociales
y salir del país.También se resolvió la situación jurídica del
representante legal de la mueblería O3 donde se realizó la fiesta.
La jueza lo favoreció decretando la falta de
mérito, se le identificó como José Augusto Morales.
El propietario del local también quedó ligado
a proceso en otra diligencia que se realizó días atrás