El 2 de febrero, los católicos
realizan la celebración de Nuestra Señora de Candelaria, litúrgicamente
conocida como La Purificación de la Virgen y la presentación del Niño en el
Templo. La luz de las velas representa la pureza, y dio origen al nombre de
Candelaria.
Este año en el municipio de
San Juan Sacatepéquez debido a que se encuentra en el color rojo en el tablero
de alertas covid-19 del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social las
actividades que con años se han llevado a cabo no se pudieron realizar con
normalidad.
“Hoy lamentablemente lo hemos
hecho solo acá en la casa, aunque ellos ya tienen un recorrido y una tradición,
porque la celebración viene de mis abuelos, y tatarabuelos no es que no
queramos celebrar”, indicó Alfonso Patzán, devoto de la Virgen de Candelaria y
San José.
El papá de don Alfonso quien
también era devoto a la Virgen de Candelaria realizó la actividad cada 2 de
febrero durante 85 años.
Las personas que visitaron el
hogar ubicado en la 1ª calle zona 3 de San Juan Sacatepéquez, pudieron llevarle
velas, flores y quedarse un momento en un lugar proporcionado para evitar
aglomeraciones.
En Guatemala esta fiesta marca
el final del ciclo de Navidad, que comienza el 7 de diciembre, víspera de la
fiesta de la Inmaculada Concepción.
