La Misión de Observación
Electoral de Guatemala (MOE-Gt) dio a conocer los recientes hallazgos con
respecto a la verificación que se hace del desarrollo del proceso electoral. En
el reporte emitido este lunes 3 de abril señaló que existe uso de criterios
discrecionales por parte del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
A través de un comunicado
detalló que este tipo de opiniones diferenciadas e inconsistentes para la
inscripción y revocación de candidaturas recae en decisiones erráticas que
causan daños irreparables al proceso electoral.
También mencionó que el
tribunal aplicó este tipo de acciones para la inscripción de binomios
presidenciales, lo cual propició el uso indebido de recursos judiciales.
Entre las candidaturas que,
según el MOE-Gt, se avalaron a pesar de existir prohibiciones están la de Zury
Ríos, de la alianza Valor-Unionista; y de Romeo Guerra, de la Unidad Nacional
de la Esperanza (UNE).
Por el contrario, se detalló
que se revocaron o negaron inscripciones “bajo criterios rigoristas”, entre
estas, las de Jordán Rodas, del Movimiento para la Liberación de Los Pueblos; y
de Roberto Arzú, del partido Podemos.
La MOE-Gt identificó al menos
a 13 candidatos inscritos que enfrentan procedimientos de retiro de antejuicio
en el Organismo Judicial, lo cual contrasta con las decisiones tomadas sobre
los diputados Aldo Dávila y José Armando Ubico.
“Al primero se le revocó la
inscripción por solicitudes de antejuicio en su contra y al segundo se le
impidió participar por la misma razón y por una solicitud de extradición de
Estados Unidos, por cargos relacionados con el narcotráfico”, detalló el
informe.
Agregó que, en contraste, han
sido registrados candidatos con solicitud de antejuicio, entre los cuales la
misión resaltó el caso de Jorge García Silva, sindicado en un caso de
corrupción en el Insivumeh; y el alcalde de Ipala, Chiquimula; Esduin Javier
Javier, investigado por posibles vínculos con el narcotráfico.