Jose Rubén Zamora es hallado culpable de lavado de dinero y condenado a seis años de prisión inconmutables en el Tribunal Octavo este 14 de junio, por el caso “Chantaje, impunidad y lavado de dinero y por lo que dictaron una sentencia de seis años de prisión inconmutables.
En la sentencia también se señaló que Zamora debe pagar Q300 mil, que es el monto que fue lavado por Zamora.
El Tribunal también señaló que Zamora deberá seguir en su centro de reclusión y que a la pena que se le impuso se le abonaría la pena que ya estaba cumpliendo.
Los jueces establecieron que si Jose Rubén Zamora no paga el monto establecido se procederá a embargar bienes hasta cumplir con la cantidad establecida y si eso no fuera posible, se abonará como pena de cárcel.
La Procuraduría General de la Nación quería que de la audiencia de reparación digna se realizara de una vez, pero la defensa de Zamora se opuso y pidió los tres días de ley, a lo que los jueces accedieron y por eso esta se llevará a cabo el 19 de junio próximo.
El tribunal, integrado por Oly González, presidenta; Otto Valvert y Glenda Duque, resolvió que los delitos de chantaje y tráfico de influencias contra Zamora no fueron comprobados por el Ministerio Público.
Zamora señaló, durante las últimas declaraciones ante el Tribunal, que en su carrera como periodista nunca fue demandado por chantaje ni lavado de dinero y pidió a los integrantes que le otorgaran su absolución y se ordenara su libertad. “Concretamente le pido al Tribunal, primero, que emita una sentencia absolutoria y se ordene mi libertad”, expresó.
Además, aseguró que el Ministerio Público no pudo comprobar el delito de lavado de dinero, por lo que la acusación debió haber quedado fuera del análisis y conclusión de las autoridades judiciales.
Luego de las argumentaciones por los primeros delitos, el juez Otto Valvert argumentó que la defensa de Zamora no pudo comprobar la procedencia lícita de Q300 mil por los que el Ministerio Público le señalaba de lavado de dinero. Añadió que se intentó ocultar el origen del dinero por medio de procedimientos que aparentaban ser legales, como la bancarización del dinero.
Finalizó con la emisión de la sentencia, al haber sido hallado culpable por lavado de dinero, cuya condena fue establecida en seis años de prisión inconmutables y el pago de una multa igual al dinero defraudado al Estado.
El Tribunal Octavo argumentó este 14 de junio
que la exfiscal Samari Gómez no cometió los delitos por los que el Ministerio
Público la señalaba, por lo que dictó su absolución y libertad inmediata.