Raúl Antonio Serrano
Hernández, apodado “El Gallo Negro y/o El Tigrillo”, (45), marero salvatrucha
de nacionalidad salvadoreña, fue localizado en la aldea Las Guacas, Masagua, Escuintla.
También fueron ubicados dos salvadoreños más, identificados como Byron Antonio
Avelar González, (27) y Josué Fernando Cáceres Menjívar, (20), a quienes
capturaron.
La aprehensión se dio por la
coordinación entre las autoridades guatemaltecas y las del vecino país. Se
estableció que Serrano Hernández tiene 6 órdenes de captura vigentes en su país
natal, entre estas, por homicidio, por un allanamiento practicado por los
Fiscales del Ministerio Público y los investigadores del Centro Antipandillas Transnacional
CAT de la Policía Nacional Civil, fue encontrado al sujeto que es reclamado por
las autoridades salvadoreñas pues tiene cuentas pendientes con la justicia
En el sector conocido como
La Línea 5, Prados de Coyuta, siempre en Masagua, Escuintla, otro equipo de
investigadores del CAT, apoyados por policías de las FEP, detuvieron a Henry
Omar Soriano Beltrán, apodado “El Coyote”, de 27 años, porque en una mariconera
llevaba una pistola marca Pietro Beretta, con el número de registro esmerilado,
un cargador y 9 municiones útiles; además tenía un celular. “El Coyote”, en el
vecino país tiene una orden de captura vigente desde el 10 de octubre del 2019
por el delito de limitación ilegal a la libertad de circulación, emanada por un
juzgado de Santa Tecla, La Libertad, El Salvador. También tiene un antecedente
por el delito de extorsión, desde el 22 de marzo del 2013.
El otro salvadoreño y marero
salvatrucha detenido es José Armando Flores Hernández, de 28 años, apodado “El
Chele y/o El Niño”, quien en una mochila llevaba una pistola marca Colt,
calibre .45, con dos tolvas y 13 municiones disponibles; tiene dos órdenes de
captura en El Salvador, una es de fecha 12 de febrero del 2019 por los delitos
de limitación ilegal a la libertad de circulación y amenazas con agravación
especial; y la otra orden es de fecha 13 de mayo del 2016 por el delito de
homicidio agravado. Y tiene antecedentes por los delitos de homicidio atenuado,
agrupaciones y tráfico ilícitos de drogas, de fecha 20 de diciembre del año
2017.
Los pandilleros son
entregados de inmediato a las autoridades salvadoreñas, para que solventen su
situación legal en aquel país.