Arnoldo Medrano, exalcalde de Chinautla, tendrá que enfrentar un nuevo juicio por el caso denominado Vivienda Digna, por el cual había sido absuelto en 2019 por el Tribunal Décimo Tercero de Sentencia Penal, donde se le señalaba del desvío de al menos Q10 millones.
La decisión se debe a que no logró el amparo definitivo de la Corte de Constitucionalidad, que ordenó repetir el juicio. Medrano había sido absuelto en el 2019 junto a varios exmiembros de la junta cotizadora, que se encargó de dar el visto bueno a la adquisición de material para la construcción de viviendas.
La investigación del Ministerio Público estableció que Medrano, como jefe edil, adquirió varios materiales de distinta calidad a lo que establecían los contratos de compra. Se presume que se construyeron más de 200 viviendas.
Este sería el segundo caso contra el exjefe edil, pues en el 2020 fue condenado a 29 años de prisión por el caso denominado Municipalidad de Chinautla: Un negocio de familia. Medrano fue condenado por los delitos de asociación ilícita, lavado de dinero y fraude. También se le impuso una multa de Q25.7 millones.
La investigación inició en el 2011, luego de una denuncia de la Intendencia de Verificación Especial (IVE) por transacciones sospechosas de constructoras que recibían fondos de la comuna. La forma de operar de la familia Medrano-Osorio, según la investigación, fue la creación de empresas manejadas por terceras personas que prestaban su nombre y la contratación de operadores.
Posteriormente, por medio de acciones
fraudulentas se adjudicaban contratos millonarios para su red de empresas, los
cuales generaban beneficios a todos sus integrantes. Ese dinero, inyectado a
dichas empresas, era utilizado para beneficios personales y para consolidarse
como grupo de poder político-económico en el municipio de Chinautla.
