Los buzos italianos han conseguido abrir
una vía de acceso al velero hundido frente a las costas de Sicilia (sur) para
buscar en su interior a los seis desaparecidos tras su naufragio, entre estos
el magnate británico Mike Lynch.
Las autoridades italianas
informan de al menos un fallecido, que era miembro de la tripulación, mientras
continúa la búsqueda de seis personas.
El hundimiento del velero de
lujo ocurrió en las costas de la provincia italiana de Palermo; en el momento
de la tragedia el velero llevaba 22 personas a bordo, 10 tripulantes y 12
pasajeros, y quince de ellos pudieron salvar su vida, entre estas una niña de
un año, Sophie, y su madre Charlotte Golunski, de 35 años, a eso de las cinco
de la madrugada del lunes 19 de agosto, se produjo un fuerte torbellino que azotó la
zona y hundió el barco a unos cincuenta metros de profundidad frente a la
localidad de Porticello.
La Guardia Costera italiana,
desplegada en el dispositivo, explicó en un comunicado que aunque la operación
“prosigue sin pausa” los buzos por el momento “están valorando si es factible
entrar de forma segura” en la embarcación.
La profundidad en la que se
encuentran los restos y la posición en la que quedaron tras el naufragio
complican la búsqueda.
Asimismo, los guardacostas
confirmaron que “por ahora no constan restos de contaminación” por el
carburante del yate.
Por el momento, la única
víctima mortal confirmada es un miembro de la tripulación, el cocinero francés
Ricardo Tomas.
Los seis desaparecidos son
el magnate informático Mike Lynch y su hija Hannah, de 18 años; el presidente
del banco Morgan Stanley International, Jonathan Bloomer, y su esposa Anne
Elizabeth Judith Bloomer; el abogado de Lynch, Chris Morvillo y con su esposa
Nada.
Entre los náufragos que han
sido hospedados en el hotel siciliano también se encuentra la esposa de Lynch,
Angela Bacares, que se encuentra en silla de ruedas por los cortes que sufrió
en los pies.
Lynch obtuvo gran parte de
su fortuna como cofundador de Autonomy, una empresa tecnológica adquirida por Hewlett-Packard
(HP) por US$ 11 000 millones en 2011. Un abogado de Lynch reveló recientemente
que el patrimonio total del empresario ronda los US$ 450 millones.