Un individuo que fue sorprendido
causando daños en una abarrotería, armado de una piocha y bajo efectos de licor,
murió, por causas que se desconocen, en la carceleta de la Policía Nacional
Civil (PNC) de San Raymundo, Guatemala, adonde fue llevado en forma preventiva por los agentes de seguridad.
Los bomberos voluntarios de la 105 Cía.
de San Raymundo fueron alertados sobre una persona que no respiraba en una de
las carceletas de la Subestación de la PNC del municipio de San Raymundo.
Al llegar al lugar, los técnicos en primeros
auxilios evaluaron a la víctima, quien ya no contaba con signos vitales; curiosos
que pasaban por el lugar identificaron
al fallecido como Kleiberth Rafael Fernández Orrego, de 44 años de edad,
residente del mencionado municipio.
Peritos del Ministerio
Público (MP) y del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) serán quienes
determinen las causas de su muerte, se dijo oficialmente.
Sin embargo, en el parte
policial los agentes de la PNC informan que minutos antes se constituyeron en
la 6a. avenida y 2a. calle, numeral 5-03, en una tienda de abarrotes y
artículos de consumo diario, ya que en el lugar se encontraba una persona escandalizando
y ocasionando daños en el negocio, por lo que al verificar dicha dirección sorprendieron
flagrantemente al hombre, a quien identificaron como Kleiberth Rafael Fernández
Orrego, de 44 años, casado, instruido, agricultor, originario y residente del
municipio.
Fernández Orrego se encontraba
bajo efectos de licor y portaba una piocha en la mano, con la cual ocasionó
varios daños a la tienda descrita, por lo que procedieron a trasladarlo a la
sede policial, y lo ingresaron preventivamente a la carceleta de esta sede
policial, mientras regresaban a recabar datos de los daños ocasionados, así
como a traer la unidad motorizada que quedó estacionada en el lugar.
Al regresar a la sede policial para realizar la
consignación respectiva, observan que Kleiberth Rafael se encontraba con una
correa de zapato negra alrededor del cuello, colgando de uno de los barrotes de
la puerta de la carceleta, por lo que los agentes optaron por cortar la correa para
auxiliarlo, pero ya no contaba con signos vitales, por lo que coordinaron con
los bomberos, quienes verificaron e indicaron que la persona había fallecido.